lunes, 14 de abril de 2008

hoy salí en remera



Apentemente, y luego de varios intentos, llegó la primavera (léase 11 grados al sol) y la ciudad se despierta. Salen los vecinos en chancletas, musculosa (esqueleto en colombiano) y con silla playera. Salís a caminar por el barrio y te encontrás con la foto: lugareños descalzos en la arena jugando al volley, el mar helado a metros no más, los pibitos jugando en el agua, inmunes a la temperatura, y de fondo las montañas nevadas...y yo embobado sacando fotos. Soy y seguiré siendo un turista en esta ciudad de cocoritos, patoteadores de clima.


Estos 11 grados hubiesen venido bien en aquellas dos noches que trabajé de extra en otra película de Hollywood, vestido de militar estadounidense, corriendo una y otra vez de un lado del descampado al otro a las 3 de la mañana, toma trás toma, "rolling... background... action... cut!... back to one please..." %#&#$%"°#&#".... ¡Basta loco! ¿No ves que tengo un frío tenaz? ¿Que me duele el cuello de llevar puesto este casco camuflado, que estas botas no aguantan el frío y el rocío del pasto, y que tengo los pies mojados y helados? ¿Y que este fusil M4 que tengo que cargar a todos lados me tiene repodrido? ¿y que esos otros pobres extras, que dios los ampare, vestidos de cientificos nucleares o marcianos, con cascos y máscaras empañadas, están tiritando de frío? ¿Por qué el plato volador de la película tiene que llegar de noche? ¿por qué no llegó al medio día y aprovecha el sol para encandilarnos en vez de invertir en 100.000 foquitos de 200 Watts para enceguecernos?

Por suerte luego de eso conseguí otro día de trabajo de extra en exteriores, e hice de cliente en un especie de Easy Home Center: me la pasé caminando por un estacionamiento bajo la llovizna, una y otra vez, una y otra vez. "Pero yo puedo más que esto!!!! Quiero ser actor!!! dame una linea para decir!!!!...." "No pibe, vos quedate en el fondo y seguí las instrucciones."

Lucharé en los próximos días para que Silvia escriba en el blog. El número de visitas semanales decae rápidamente y es necesario renovar. Ya estoy pasado de moda.

Abrazo
O.

miércoles, 9 de abril de 2008

Locos de atar


Poco importa si la pelota no dobla. Si fue penal, offside o si estuvo mal expulsado. Aca no te tirás al suelo y hacés 5 vueltas agonizantes gritando de dolor cuando te rozan el tobillo. Aca la pelota no es linda. Aca no hay pelota. Aca lo único que hay es un especie de tejo, disco grueso con forma de gnoqui de sémola a la romana bien sequito, al que hay que darle latigazos con un palo de metro y medio mientras uno mantiene el equilibrio patinando sobre el hielo. Aca se trata de meter este gnoqui de sémola (que se mueve a velocidades infernales) dentro de un arco y si alguien se entromete con tu objetivo y quiere sacarte del camino propinarle una paliza a puñetazo limpio hasta que se caiga al piso resbaladizo. Una vez en el piso y sangrando ya no se le puede pegar...sería descortez...de mala educación.

El hockey sobre hielo es un enigma para mí. Siendo el deporte de cabecera en Vancouver y me animo a decir en todo Canadá, no conocer las reglas ni los equipos clásicos es casi un crímen. Será por eso que no hice muchos amigos todavía. Se habla de hockey y no hockey sobre hielo. Como en Argentina decimos hockey y no hockey sobre cesped. Los Vancouver "Canucks", el Boca o River de la ciudad, acaban de quedar afuera de las finales. Una muy mala temporada. Sus efectos se respiran en la calle. Ya no ho hay buses que llevan la frase "Go Canucks" en el frente del vehículo (para suerte de los turistas que ya no se desesperan buscando en el mapa la estación "Go Canucks" para ver si ese bus los deja más o menos bien). Los diarios hablan pestes del equipo, su falta de coraje, la ida de su director técnico, etc. Me hace pensar que en la Argentina no somos mucho mas exitistas y superficiales que en otros países cuando se trata de deportes. Es todo la misma porquería.

Y a pesar de la mala temporada, los chicos siguen soñando con jugar para los "Canucks". Así como me imagino el patio de una casa porteña con su pequeño arco de futbol, o el aro de basquet en el garage de la casa neoyorquina, aca es un arquito de hockey en el jardín. Nuestro vecino salió a practicar ayer, a pesar de los 5 grados que estaban haciendo. Un deporte que por el momento y hasta que lo entienda, me seguirá pareciendo una locura.


Otra vista interesante desde nuestro departamento. A veces el mundo se parte en dos. Puede ser en diversos planos y profundidades. Esta vez el mensaje es bastante claro.


¿Algún lector de este blog visita los sitios recomendados que se mencionan arriba a la derecha? Recomiendo que hagan el índice de felicidad. Es cortito. A Silvia le dió más feliz que a mí, y eso que yo estoy con ella y ella me tiene que bancar a mí.

saludos
O.