lunes, 23 de agosto de 2010

Con el oso respirando en la oreja

Más o menos esa es la sensación que tuve durante algunas horas de caminata en los últimos paseos que hicimos. Nadie me obligó y hasta yo lo busqué, pero de todas formas esa adrenalina extra no le viene mal al cuerpo. Estuvimos en Buntzen Lake (30 km. al noroeste de Vancouver), un lago divino que es reserva hidroeléctrica para la ciudad. Tiene un montón de caminos para recorrer, nosotros elegimos el que le da la vuelta y en total fueron 3 horas de caminata y 2 de descanso incluyendo almuerzo y metida en el agua. El camino empieza con un aviso que informa sobre la presencia de osos y pumas, genial. Y uno se pregunta, realmente quiero seguir? Es prudente? Oliver esta cargando a Simón y es el único que puede pelear contra las fieras, pero cómo? Además, en mi único encuentro con oso grite, corrí, lo mire a los ojos y eso es todo lo que no hay que hacer. Definitivamente la presa ideal soy yo, y para completar yo cargo la comida… Pero mas adelante se ve que se abre el paso hacia un puente flotante sobre el lago cristalino y no hay nada que hacer, uno sigue. Después viene el bosque de cedros y abetos, con helechos y musgo, increíble. Pasan las horas, las subidas y las bajadas y finalmente llegamos a un puente colgante, horrible si tenemos en cuenta que el vértigo esta instalado en la familia. Sin duda alguna, en mi record de pesadillas estos puentes han aparecido más que los osos. Pero las opciones son: pasar por ahí y llegar a la playa o volver a la boca del oso. Me animo a pasar, llego a la playa y sin pensarlo me tiro por primera vez en un lago canadiense. Si, estaba frio pero no tanto como para impedir 4 o 5 zambullidas más.
Embalados con la actividad caminata y naturaleza, y habiendo hecho la tarea de encontrar la forma de dormir mas cómodos los tres en la carpa, nos fuimos dos noches y tres días de camping. Esta vez el destino fue Sunshine Coast. Carro media hora, ferry de 40 minutos y llega uno a este paraíso. Sol, calor, playas, mar color Caribe y cristalino (frio eso si), lagos de temperatura mas agradable rodeados de bosque, y otra vez, los avisos de los osos. Nos fue muy bien con la dormida, por lo menos a Simón y a mí. Oliver tenía una colchoneta que no le amortiguaba para nada y amaneció las dos madrugadas en la hamaca. Esta vez hicimos tres paseos. Uno al estuario de un río, al rayo del sol matutino y con metida de patas al mar. Otra caminata de una hora (cada tramo) a los estrechos de Skookumchuk, famosos porque los cambios de marea son de 4 metros aproximadamente y se hacen unos remolinos y huecos en el agua impresionantes. La otra caminata (media hora cada tramo en terreno muy inclinado) fue a la cima de Pender Hill. Al llegar la vista del mar, las montañas y lagos es increíble. Por suerte no vimos ningún oso, no sabemos cuantos nos vieron u oyeron a nosotros pero tampoco estamos interesados en ese dato.
Aca van algunas fotos y videos.



Buntzen Lake










Porpoise Provincial Park (Sunshine Coast)

Llegando


En la playa del parque




Camino al estuario




Algo raro en la foto?


Los estrechos de Skookumchuk
De madrugada
En la cima de Pender Hill



Ruby Lake



3 comentarios:

Martha dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Martha dijo...

Que tal la habladera de Simon en Este video. Divino!!! Esta maravillosa la cronica del paseo. Eso si los pense en el puente, pues se que son poco amigos de esa clase de pasos. Pero en fin, valio la pena, se ve un sitio maravilloso, delicoso!!! Se ve que lo disfrutaron al maximo. Y Simon, cada dia mas bello. (Claro que se nota algo especial en la foto!!! jaja, a comprar zapatos nuevos!!!!)Felicitaciones!!

Anónimo dijo...

Que maravilla de relato, las fotos y el video que felicidad ver a Simon tan grande y el oficio de espanta-osos me parecio divino....ustedes son realmente geniales; que paseo mas increible. Y lo de los osos, se me pone la piel de gallina, pues un encuentro que ellos no es nada facil...mejor prefiero seguir en Animal Planet... y los relatos de ustedes...un beso muy grande, los felicito, los adora,
mamá-suegris- abuela